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Sobre este tema conversamos alrededor de un humeante café, un
experto en el tema como lo es Manuel Mieres Díaz y quien esto escribe. Coincidimos
en que toda organización cuenta con una cultura inherente, que la distingue e
identifica y que las manifestaciones de la misma ofrecen categorías para su
análisis. La Cultura Organizacional definida en forma sencilla, es el
conjunto de valores, normas y hábitos compartidos por los miembros que integran
una empresa. Es una forma aceptada de interacción.
Lo que hace importante el estudio de la Cultura
Organizacional es que permite identificar y entender el sistema de valores
y características que hacen diferente a una empresa de otra; de manera que,
pueden facilitar sus procesos operativos o pueden convertirse en barreras para
alcanzar los objetivos.
Para una mejor comprensión de las características que pueden
distinguir a una Cultura Organizacional de otra, en forma somera, se
pueden tomar en cuenta las siguientes:
La Cultura Organizacional es dinámica, por lo que
cambia con el tiempo y las circunstancias; de tal manera, que los miembros de
la empresa, no solamente la aprenden e internalizan, sino que pueden
transformarla. Los sucesos en el entorno también son factores de cambio, ya que
en un contexto tan competitivo como en el que vivimos, se exige innovación y
adaptación como bastiones de la cultura. Incluso, la pandemia ha obligado formas
distintas de convivencia en las organizaciones.
Un ejemplo clásico de la manera en que la cultura controla la
forma de hacer las cosas e impacta el desempeño de las personas lo tenemos en
los choferes que viajan de nuestro país, México hacia la frontera con Estados
Unidos de Norteamérica. Los choferes cambian su manera de conducir al cruzar la
frontera debido a que el entorno se modifica y las reglas también. Se ajustan
el cinturón de seguridad y no rebasan los límites de velocidad.
Existen argumentos suficientes para asegurar que el desempeño organizacional está ligado a la Cultura Organizacional y que una cultura sólida con valores definidos con precisión y claridad, así como llevados a la práctica en forma cotidiana pueden predecir el logro de la empresa. Hay estudios que han demostrado que las empresas con una cultura participativa tienen un mayor retorno de la inversión sobre los activos y casi el doble de rendimiento de la inversión que aquellas que no cuentan con una cultura fuerte.
Realizar un diagnóstico de la Cultura Organizacional
puede resultar útil para cimentar la construcción de una visión compartida, una
visión de futuro anclada en metas, valores y objetivos que puedan unir a los
miembros de una organización; siempre y cuando, haya una aspiración en común.
Pues, solo así, podría propiciarse el compromiso genuino.
Por ello, en Sepanka Suite trabajaremos en conjunto
con un experto en el tema como lo es Manuel Mieres Díaz para digitalizar
encuestas y documentos necesarios para ofrecer un diagnóstico de la Cultura
Organizacional en breve. Mientras tanto, si les parece interesante este
tema pueden leer sobre el Modelo de Cultura Organizacional de Edgar Schein.
Guadalajara, Jalisco a mayo 3 de 2022.
Norah Terrazas es Coordinadora de Proyectos en Sepanka Suite, donde colabora en el desarrollo de la Plataforma para la Gestión y Desarrollo del Talento. Se ha formado en el área de Recursos Humanos y desempeñó cargos directivos en varias organizaciones.